El clarín de Cajamarca, un instrumento de viento de
inspiración hispánica que apareció en el siglo XVIII, está considerado por el
gobierno peruano como Patrimonio Cultural de la Nación. El clarín de Cajamarca
o “shukcha”, que es el nombre en quechua de la caña con que está fabricado, es
uno de los instrumentos musicales más peculiares y propios de la región
cajamarquina. El clarín también llamado Kepa, es una trompeta de tres partes:
un pabellón de calabaza, coco u hojalata, el cuerpo de una sola pieza de
carrizo grueso de unos 3 a 4 metros de largo y una boquilla desarmable de
10 centímetros. Su ejecución es
considerada “particularmente difícil” porque hay que sostenerlo con el pabellón
hacia arriba en posición diagonal, coger el cuerpo con un brazo y agarrar la
boquilla con la otra mano para soplar por ella. El clarinero suele aparecer
acompañado de un ejecutante de caja o tambor, combinación usual en Cajamarca
que constituye una de las imágenes típicas del folklore local. El clarinero
está presente en faenas agrícolas (corte de trigo y limpia de acequias),
fiestas patronales y ganaderas, y en las danzas tradicionales como los Chunchos
o los Incaicos.
101 RAZONES
Por las que estoy orgullo de ser
cajamarquino
Jorge Pereyra Terrones
me gusto por que es uno delos instrumentos que tenemos en cajamarca
ResponderEliminarMe gusto por que se trata de un instrumento de cajamarca y con ese instrumenro se ase canciones muy bonitas
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